WonkaPistas

19.1.05

Discriminación salarial de las mujeres

En la prensa de ayer tocaba una reedición burda del tópico de la discriminación salarial de las mujeres. De ello ha dado suficiente cuenta Josu en Malaprensa. Tan sólo quiero recordar aquí el último estudio serio que se ha hecho con datos españoles, y anotar un par de hipótesis que su lectura me ha sugerido.

Se trata de un estudio de Juan J. Dolado y Vanesa Llorens, "Gender wage gaps by education in Spain: glass floors vs. glass ceilings". En él, por ejemplo, teniendo en cuenta sólo hombres y mujeres universitarias, trabajando a jornada completa un mínimo de 15 horas a la semana, la diferencia salarial no llega al 10% y teniendo en cuenta las diferencias entre ambos grupos (los hombres son mayores, trabajan más horas a la semana, tienen más experiencia laboral, tienen más antigüedad en la empresa, trabajan menos en el sector público, ocupan más puestos directivos, etc.) el "gap" salarial se queda en el 3%. En el caso de los trabajadores que no tienen estudios universitarios el "gap" inicial es del 23%, pero casi no se reduce al tener en cuenta las variables de control (baja al 20%).

Mi juicio. ¿Quiere esto decir que las trabajadoras sin título universitario están discriminadas respecto a sus compañeros masculinos? No: el hecho de que se sigan encontrando diferencias de salarios a pesar de tener en cuenta algunas de las diferencias en las características de hombres y mujeres no quiere decir que haya que pensar que aquéllas haya que achacarlas a la discriminación que efectúan los empresarios o, al menos, no a una discriminación por razones de sexo.

Por ejemplo, una variable que no suele incluirse en estos trabajos (tampoco en el mencionado), porque no suele preguntarse en las encuestas correspondientes, es la del tipo de estudios llevados a cabo. José Carlos Rodríguez lo recordó en una anotación en su blog hace un tiempo. Pero el tipo de estudios es importante, pues los trabajos para los que se requieren estudios de ciencias o ingenierías están mejor remunerados que los trabajos "asociados" a estudios de letras o ciencias sociales; y no me refiero sólo a estudios universitarios sino, también, a estudios de formación profesional (se pagan mejor los asociados a FP en ramas industriales que a FP en ramas de servicios). Si esto es así, hay que recordar que la proporción de varones en los estudios de ciencias, ingenierías, ramas industriales de la FP es muy superior a la de las mujeres, que abundan, precisamente en los otros estudios.

Por otra parte, seguramente sí que "discriminan" los empresarios, pero no en el sentido negativo de la palabra discriminar, sino en el sentido de discernir o distinguir: pagan menos a quienes creen que van a producir menos a lo largo de su estancia en la empresa. Esta creencia no deja de ser un juicio subjetivo de un individuo con todas las limitaciones de la racionalidad humana, que utiliza indicadores diversos para atisbar el futuro a partir de cuyas previsiones elabora sus planes. Un indicador, impreciso como todos, es el sexo del trabajador: estadísticamente cabe pensar en una carrera profesional con menos estabilidad en una empresa por parte de las mujeres, con el problema que eso representa para el rendimiento de las inversiones en capital humano que hacen los empresarios en sus trabajadores. El empresario privado ha de ser lo más cuidadoso posible, dentro de esas limitaciones, en la elaboración de sus planes, pues si se equivoca, lo paga con sus pérdidas para su propiedad. Esto no sucede en la administración pública, que puede permitirse, así, contratar según indicadores presuntamente "objetivos" del rendimiento futuro de un trabajador, tal como haber pasado un examen.

El tipo de estudios y la diferente perspectiva del empresario y del administrador público explicarían por qué el "gap" es más amplio en el sector privado que en el público: en el público el número de empleos vinculados a las "ciencias" es mucho menor que en el privado, luego la proporción de varones ocupados en profesiones que se pagan mejor sería mucho menor; en el público, no hay un empresario que tenga que hacer sus planes y revisarlos a la vista de la productividad de los trabajadores.

5 Comments:

  • Excelente artículo wonka, me alegro de que te hayas animado a escribir un blog.

    Séneca.

    By Anonymous Anónimo, at 1/19/2005 2:56 p. m.  

  • Séneca. Gracias por pasarte por aquí. Ya sabes dónde está tu casa.

    By Blogger Wonka, at 1/19/2005 3:29 p. m.  

  • Wonka, escribí esos dos posts pensando en que se repetirían en el futuro "estudios" como éste.

    Un abrazo y mucho ánimo con tu bitácora. Enhorabuena.

    By Blogger José Carlos Rodríguez, at 1/19/2005 4:54 p. m.  

  • Gracias, José Carlos.

    By Blogger Wonka, at 1/19/2005 5:05 p. m.  

  • No existe ni existirá nunca ningún empresario que quiera pagar menos a las mujeres que a los hombres.

    Lo que quiere cualquier empresario es pagar lo menos posible a cualquiera de sus empleados (hombre o mujer) para ahorrar costes.

    Si fuera posible (que no lo es) que hubiera una discriminación así, si fuese cierto que una mujer cobra menos que un hombre por el mismo trabajo y la misma experiencia y antigüedad en la empresa, ¡los empresarios sólo contratarían mujeres!

    By Anonymous Anónimo, at 8/24/2005 10:13 a. m.  

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